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miércoles, 12 de noviembre de 2014

Entre sueños

Me gusta mucho este tango de Anselmo Aieta, Juan Polito y Francisco García Jiménez, que fue el autor de los versos. Es un tema  que en principio resulta difícil para cantarlo, porque se sale de la horma general del género, atendiendo al hecho de que fue creado en el año 1928, sobre música de esos fenómenos, Aieta y Juan Polito. Luego García Jiménez le pondría los versos correspondientes.

Aieta fue un músico intuitivo que dejó una colección impresionante de temas que sacaba espontáneamente y con toda facilidad, aunque no sabía prácticamente música. Charlo, que lo visitaba asiduamente para ver sus nuevas creaciones, solía pasárselas al piano en casa del autor. Y el mismo Charlo grabaría este tema con dos orquestas en ese año. Con la de Francisco Canaro el 31 de octubre de 1928 y con la de Francisco Lomuto, ya que nunca militó como cantante fijo de conjunto alguno.
             

                         

Polito fue, en este caso, quien lo armó en el piano, junto a Anselmo que apuntaba con su fueye,  y le fue agregando algunas variantes de su cosecha, que le dieron nuevos ingredientes y fuerza al tema. Juan Polito tocaba el piano en la orquesta de Aieta, y en el Germinal, donde actuaban en 1928, armaron el tema, en los descansos de la orquesta. Esto me lo contó hace años el propio García Jiménez en el Palais de Glace, desde donde se transmitía el programa de televisión Odol pregunta. Yo contestaba entonces sobre la Historia del Tango, y García Jiménez era jurado en el tema de Carlos Gardel, que iba dentro del mismo programa.

El comienzo de la letra es muy sugerente y te zambulle de cabeza en el tema. Porque lo que parece una realidad amorosa se va a ir desdibujando en el transcurso de la obra, revelando el nombre de la misma. Y lo logra el poeta, al que Gardel le grabó nada menos que 17 páginas,  con unos trazos y pinceladas que van descubriendo el drama que sufre el protagonista.  Por la ausencia de la persona que vuelve una y otra vez, pero no físicamente, como lo va descubriendo el tango en su transcurso.

Tu paso suave
llegó a mi pieza, 
mis brazos se abren
mi boca besas...
Cuánto tiempo te he esperado,
cara a cara con la muerte,
y a la muerte le he guapeado
para verte...
Postrado, peno,
y al lado mío,
no hay ni un amigo
del tiempo bueno.
Qué me importa ya su olvido,
si en tus manos me has traído
lo mejor de tu amistad.


                                          

Francisco García Jiménez

Francisco García Jiménez fue uno de los grandes poetas que tuvo el tango, aunque quizás sus méritos no sean reconocidos debidamente. Fue de los renovadores, de los primeros que le quitó al  tango ese tono de arrabal amargo,de la traición amorosa y para mí junto a Le Pera y José González Castillo se inscribe, a través de sus letras -porque era hombre de letras-, en la elevación de la poesía de tango, que inmediatamente tendría continuación en otros nombres brillantes de mucho peso.

¡Pobre de mí!..
Tu mano busco alrededor
y no está aquí...
Todo es un sueño,
visión mentirosa,
y burla del dolor.
Al despertar
la soledad de mi penar
es más atroz.
¡Quién sabe por donde andarás,
y si de mí te acordarás
mientras me muero sin tu adiós!

Juan Polito

Este tango, aunque no esté en la mente de toda la gente, ha sido grabado además por Carlos Dante acon la orquesta de Rafael Canaro. Carmen Duval, con la orquesta de Argentino Galván,  hizo una gran recreación del tema, y la he mostrado en estas páginas. Francisco Rotundo, Ricardo Tanturi, Aníbal Troilo, Juan D´'Arienzo lo registraron en forma instrumental. También Ástor Piazzolla con su orquesta  en 1967.  Julio Sosa secundado por la orquesta de Leopoldo Federico. Raúl Berón con la orquesta de Miguel Caló dejó una versión muy buena el 8 de mayo de 1944, en la que también brillan el piano de Maderna y el violín de Francini.
 
Volvé a mi ojos,
visión que pierdo,
morfina y opio
de los recuerdos...
Entre sueños engañame                                                   
con la sombra que yo invoco,
y al silencio así llevame
poco a poco...
Mujer querida, sos el pasado,
la alegre vida que ha regresado...
¡Es tu mano aquí en mi pecho
la que siento aquí en mi lecho,
la que alivia mi dolor!...

Me encanta la sensación que transmite, lo logrado del clima, de omnisciencia, de final. Los invito a escuchar la versión de Miguel Caló con Raúl Berón.

                                 



2 comentarios:

  1. tangazo,de las cantables me gustan las de beron y carmrn duval y de las instrumentales el gordo le da el clima musical bien de profundis saludos y sigo permanentemente tus notas eso si de bailongo no opino porque esa materia me la llevo a previa desde el dia que naci ,y bue...si supiera milonguear al igual que jugaba al futbol seria un fenomeno con la pelota y jugando era un mimbre,para bailar un poste de quebracho... que va cha che abrazo juan

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  2. ¿Y que querés...?Todas no las podés acamalar... A todos nos gustaría poder haber algo que nunca aprendimos ni tuvimos la carpa necesaria... Pero el gotán nos llena el alma. A mí me hubiera gustado cantar y tocar un instrumento, y ya lo ves... Cero al as. Abrazote.

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